Centro Cultural Mirentxu
Casa Baca

Sobre el espacio...

CASA BACA, representativa de una época de consolidación de la ciudad presentada en uno de los barrios más antiguos de Jujuy, con fuerte valor histórico y  comunitario.

Una casa abierta y paradigmática donde vecinas y vecinos acudían a hablar por teléfono (ya que fue la primer casa del barrio que contó con comunicación en la zona).

Fue también lugar de encuentro de niñas, niños y jóvenes que pasaban el verano en una de las pocas piletas del barrio.  Un hogar abierto a la comunidad que se recuerda como un ámbito de recreación, más que una casa; por lo que su valor significativo está contenido en las vivencias, las experiencias, los encuentros, celebraciones familiares y  actividades de  esparcimiento deportivo.

 (Aún todos recuerdan lo popular que era el aro de básquet y su una cancha de vóley).

la casa tiene unos ciento cincuenta años, del año 1930 aproximadamente se consolido como vivienda, antes de eso, la casa funcionó como galpón de una fábrica de ladrillos, cuando construyeron parte de la casa aparecieron restos de esa fábrica.

Mirenxtu Aguirre de Baca

Mirentxu, pilar de la casa y de la familia. arquitecta, activista y humanista. Su fuerte compromiso social se expresó tanto en lo profesional como en lo personal; y su sensibilidad aparecía con la misma fuerza en las iniciativas ambientales y en las solidarias; y en la cooperación, de lo cual es notorio ejemplo el haber llevado molinos de piedra a pueblos de la Puna para que pudieran obtener agua.En sintonía con su sensible mirada de la vida, Mirentxu plantó en el parque de esta casa un roble, retoño del Árbol de Guernica, hecho de profundo significado humanista y pacifista, máxime teniendo en cuenta que ella misma era descendiente de vascos.

El roble que ella plantó en el parque de la casa, retoño de un roble de Guernica, siendo Mirentxu hija de padres vascos, le confiere un sentido profundo y humanista en sintonía con su mirada de la vida. También es delicado testimonio del paso de Mirentxu por estos espacios la presencia en los jardines de su flor favorita: “ave del paraíso” (Sterlitzia Reginae), especia sudafricana ampliamente difundida en la zona como planta ornamental.